La habitaciòn duplex es espectacular, con vistas increibles a toda la ria. Súper tranquilo para descansar y desconectar. El desayuno todo buenisimo, y Marisa muy atenta en todo y muy amable.
La única "pega" es que por ser tan tranquilo hay que coger el coche para cenar, ya que no hay nada cerca para poder ir andando.