Lo único que nos gustó fue la ubicación. Lo que no, la calefacción y el agua caliente no iba, el ascensor estaba roto y viajábamos con una persona en silla de ruedas, había muy mal olor en el apartamento, las escaleras eran peligrosas y parecía que se iban a caer, el sillon que se convertía en cama individual muy ruidoso e incómodo. Dejamos una fianza de 150 euros el día 5 de diciembre y a día 26 de diciembre, no nos la han devuelto, hemos intentado ponernos en contactos con ellos por correo, whatsap y teléfono, y no contestan a nada!