Están con personal reducido por pandemia y eso hace que baje la calidad del servicio. Personal desanimado. Puede ser miedo al contagio de covid, no se. Atención en recepción muy fria, pedidos de comida o bebidas que no llegaban, los vidrios de la habitación tenían tanta tierra que desmejorada la hermosa vista, etc. Las instalaciones son óptimas. La pileta es lo único distintivo que vale la pena. Gimnasio con máquinas rotas. El servicio de spa está totalmente suspendido. Mi experiencia no fue la mejor. Espero sea una situación de excepción por el contexto