El hotel es sencillo. Muy bien atendido y todos los defectos que pudiera tener quedan opacados por la atención cordial, amigable y esmerada del personal. El desayuno es sencillo y normal. Está muy bien ubicado, a pocos metros de la peatonal y la rambla. Transporte público accesible muy cerca para ir a las playas del sur. Lo malo: el baño muy pequeño. Por relación precio-calidad y teniendo en cuenta los altísimos precios de los hoteles en Mar del Plata, es recomendable si no se tienen ambiciones de 5 estrellas.-