La experiencia fue más que excelente, el hotel es pequeño pero muy cómodo, salvo el ambiente húmedo de las habitaciones pero se entiende que es normal debido al pueblo, cerca de todo. El personal excelente, atento y amable en todo momento (todos y cada uno de ellos). El desayuno sencillo pero rico y con verdadero café, por $25 adicionales puedes pedir cualquier cosa de la carta. Sin duda, un lugar al que volveré y recomiendo ampliamente para cualquier tipo de viajero. ¡Felicidades!