Una estancia magnífica. Comida buena, algo repetitiva, pero rica. Equipo del restaurante estupendo, especialmente Cruz, muy atento y amable. El equipo de animación, lo mejor del hotel: se nota que les encanta su trabajo, mil actividades durante el día para niños y adultos, y montan los shows de la noche que son lo mejor del hotel. Se aparca con facilidad, la playa está lejos, pero hay bus. Al ladito de las dunas. Muy buena experiencia.