Hotel familiar muy bien cuidado. Se nota que tiene sus años, pero todo el mobiliario e instalaciones están muy bien cuidadas.
El matrimonio que lo regenta, esta al pie del cañon y cuidan cada detalle. La cena estuvo muy buena y casera. Lastima que no pudiéramos disfrutar de Almagro, por el Covid. La excusa perfecta para repetir y seguro también volveremos a hospedarnos aqui.