Cuando llegamos, no hay recepción, esta en jaca...tardaron en cogerlos el teléfono 1hora. Respecto a las normas, todo tenía penalizaciones, y la ropa de cama olía mal, el colchón de muelles digno de un faquir, la manta si la usabas, la tenias q volver a doblar y guardar en su sitio, a saber cuantos usos tenía, porq olía mal. El bar pizzeria las hayas, lo único bueno, del alojamiento. El agua caliente se acaba muy rápido.