Perfecta.
Probablemente ha sido una de las estancias más limpias en las que hemos estado. Todo nuevo, limpio, cómodo, acogedor y práctico.
Cogen el teléfono a la primera.
Hay cositas para picotear y beber.
El desayuno tiene de todo.
Las habitaciones y las sábanas perfectas.
Totalmente recomendable y seguramente si volvemos a Motril o cercanías, repitamos allí.