Lo escogimos por la cercanía al aeropuerto para una noche. Excelente atención tanto en recepción como en el restaurante. La pega importante son las camas. Colchón incomodísimo de 150 que se mueve cada vez que tu pareja se gira lo mas mínimo. No tiene zonas diferenciadas y los muelles son insufribles. El sofá cama para los niños ... hundido completamente por el centro. Los niños, siendo muy delegados, incómodos toda la noche. En definitiva, por desgracia para no repetir. Un hotel donde las camas no son cómodas no se puede recomendar.