Nuestra estadía en el hotel Los Lagos fue simplemente maravillosa. Desde el primer momento, el personal nos recibió con una sonrisa y nos hizo sentir como en casa. Las habitaciones estaban impecables, cómodas y con una vista espectacular al entorno natural. Uno de los grandes atractivos es la piscina de aguas termales, perfecta para relajarse después de un día de excursiones.
La ubicación es ideal, cerca de los principales atractivos turísticos de la zona, y el restaurante del hotel ofrece una variedad deliciosa de platillos locales e internacionales. Además, el desayuno incluido fue abundante y sabroso.
Sin duda, recomendaría este lugar a cualquiera que busque una combinación de comodidad, naturaleza y excelente servicio. ¡Definitivamente regresaremos!