El hotel es muy bonito, la comida en el restaurante de lujo y la atención en ambos sitios fue perfecta. El único inconveniente es que pagamos una villa con vistas al río y si bien está cara al río, no tiene vistas pues está a ras de suelo, sería mejor cambiar la descripción, igualmente la villa era muy amplia, moderna y limpia. Para el SPA reservar con antelación o podría estar todo reservado.