El alojamiento esta decorado con buen gusto; la limpieza fue decepcionante, sábanas usadas y sucias ( había manchas de maquillaje en las sábanas) y en el baño había pelos).
Otro aspecto desagradable fue que nos avisaron a última hora y en el mismo día que si nos retrasabamos en la llegada nos cobrarían un recargo, asunto que no constaba cuando realizamos la reserva; nuestro vuelo llegaba tarde, por lo que tuvimos que pagar un recargo. También nos cobró una tasa por limpieza y otra por impuestos (iva) que tampoco figuraba en la reserva inicial. A la hora de pagar y hacer cuentas con la propietaria fue muy confuso, inicialmente nos cobraba en dólares, pasando a euros luego a pesos y pagando finalmente en euros. No nos gustó esa sensacion de confusion y el pago de tasas que no constaban en el momento de la reserva. Decepcionante.