La atención del personal ha sido excelente y sumamente gentil. Tanto el personal de mostrador, de puerta como de cocina y comedor han hecho todo el esfuerzo pordar el mejor servicio.
Cosas que no están a la altura de un hotel de esta categoría son, la falta de una plancha para ropa, un frigobar, no disponíamos de toallas para bidet y nos dijeron que si manchábamos toallas debíamos pagarlas. Se agradece el agua cada noche, pero sería prudente dar botellas cerradas (nuevas)